Las empresas de Carlos Slim se enfrentan a los reguladores, sin que eso afecte, de momento, a sus resultados.
POR/ Liliana Corona
La mayor empresa del magnate mexicanoes América Móvil, que mantiene dos terceras partes de la participación de mercado en telefonía fija y móvil en el país. Y ello pese a varias regulaciones, nacidas de la reforma de telecomunicaciones, que le han aplicado varias medidas especiales para intentar impulsar la competencia.
En este sentido, Slim logró en 2017 una 1,000,000 victoria en los tribunales, pues la Justicia 990,000 reinstauró la llamada interconexión, el 980,000 pago que sus compañías reciben cuando las llamadas de otros competidores pasan por sus redes. El Congreso había establecido que América Móvil no podría cobrar por ese servicio, pues posee gran parte de la infraestructura de telecomunicaciones, pero el Tribunal Superior canceló la norma, y Slim volvió a cobrar 0.028562 pesos por minuto por cada llamada. Los ingresos de la empresa subieron un 4.7% el año pasado y superaron los 1,000 millones de pesos.
Sin embargo, hoy enfrenta un nuevo reto, pues el regulador de la industria, el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT), le obliga a crear dos nuevas empresas para separar los servicios mayoristas los que ofrece a otras compañías de Telmex y Telnor, sus firmas de telefonía fija. Los precios de los servicios los determinará el IFT, pero América Móvil se opone porque dice que “son sustancialmente bajos respecto a referencias internacionales”.
“Una empresa que tiene años bajo una estructura que es funcional, forzosamente le afecta una separación, ya que es una reestructuración de toda la operación de la compañía. Aunque la parte que se separe, la mayorista, tiene recursos suficientes para operar, esto no quiere decir que sea negocio para la empresa”, considera Salomón Padilla, abogado especialista en telecomunicaciones.
Como el cumplimiento de la medida es obligatorio, según marca la ley, América Móvil ya trabaja en llevarla a cabo, mientras prepara su impugnación en los tribunales.
Todo apunta a que los enfrentamientos entre Slim y los reguladores continuarán. El empresario se convirtió en uno de los hombres más ricos del mundo gracias a la privatización de Telmex, que obtuvo a principios de los noventa junto a otros socios, y a que con la llegada del boom de la telefonía celular pudo seguir operando con Telcel como un monopolio de facto.
Ahora, dice que las leyes que preten-den impulsar la competencia son injustas, pues favorecen a las otras compañías frente a la suya. “México es un país que tiene que hacer mucho en cobertura de servicios de telecomunicaciones. Desafortunadamente, con la regulación se ha penalizado la inversión que hemos hecho, porque requerimos bajar nuestra participación de mercado”, señaló Slim este año.
Con todo, América Móvil acaba de lanzar la Gigared 4.5G de Telcel, que brinda velocidad tres veces mayor al 4G actual, y a la que dedicó cuatro años y una inversión de 8,000 millones de dólares.
El próximo objetivo del empresario es un sueño que ya tiene bastantes años: la televisión de paga. Según varios analistas, cumplir con esta separación de servicios que le exige el IFT lo acerca un paso más en la meta de conseguir la licencia en México para brindar este servicio, que de momento tiene restringido, pues su título de concesión no lo incluye. El año pasado, la OCDE recomendó en un análisis que Slim pueda entrar a TV de paga, como una manera de fomentar la competencia en otro sector muy concentrado, en este caso, en manos de Televisa y TV Azteca.
El gigante privado América Móvil es la mayor empresa privada de México, y ya le pisa los talones a Pemex en ventas.
FUENTE Grupo Carso
Grupo Carso es un conglomerado muy diversificado.
Fuente: Grupo Carso
Carlos Slim apenas concede entrevistas, y sus empresas tampoco se caracterizan por ser las más transparentes ante las solicitudes de los medios. Sin embargo, en los últimos tiempos, el empresario se da un baño de masas ante cientos de periodistas al menos una vez al año, donde en un largo monólogo desgrana su visión de la actualidad.
Lo hizo en enero de 2017, días después de que Donald Trump asumiera la presidencia de Estados Unidos, y lo volvió a llevar a cabo a mediados de abril, en el contexto de la contienda electoral mexicana. La mayor parte del discurso la destinó a defender el proyecto del nuevo aeropuerto de la Ciudad de México, que el candidato presidencial Andrés Manuel López Obrador ha criticado en numerosas ocasiones.
El empresario sería el mayor perdedor si se cancela el nuevo aeropuerto: con Carso Infraestructura, de su conglomerado Grupo Carso, ha ganado el 68% del monto licitado hasta la fecha, aunque, en algunos casos, en consorcio con otras firmas. Entre otras cosas, es el encargado de la construcción del edificio terminal y de la pista tres.
Ahora, después de muchas declaraciones cruzadas entre Slim y López Obrador, en las que se han criticado mutuamente, el candidato ofreció una posible solución que calmaría los ánimos, al plantear su concesión al 100% a la inversión privada.
Este es uno de los principales proyectos de Grupo Carso, en un contexto de desaceleración en el país de la infraestructura y la construcción, por la menor inversión con recursos federales. Por ello, en 2017, las ventas de los segmentos industrial y de infraestructura y construcción en la compañía cayeron.
En su reporte anual, la firma admitió que tuvo una menor actividad con grandes clientes como Pemex y la Comisión Federal de Electricidad. “Las ventas acumuladas de Grupo Carso fueron de 93,593 millones de pesos, lo que representó una disminución de 1.7% respecto a 2016. Esta reducción se explica principalmente por la terminación de obras en Carso Infraestructura y Construcción (CICSA), y por la falta de licitaciones en infraestructura y servicios a la industria petrolera”, explicó la empresa.
De cara al futuro, Slim busca aprovechar la apertura de ese sector a la inversión privada con Carso Energy, que de momento solo contribuye con 0.1% de las ventas, pero que ya tiene planes para crecer en el servicio de transporte de gas y en otros proyectos de petróleo. Este tema de la reforma energética, sin embargo, puede ser otra fuente de conflicto entre el empresario y López Obrador.
La tarjeta de crédito de Grupo Financiero Inbursa encabezó el año pasado la lista de las peor calificadas en cuanto a la transparencia de sus contratos, según un análisis de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef). En una escala del 1 al 10, Inbursa obtuvo 2.4 puntos, muy lejos de HSBC y Scotiabank Inverlat, que empataron a 9.4 puntos como las mejor puntuadas en el ranking.
Esta evaluación es parte de un análisis de las entidades bancarias que hace la Condusef, al azar y sin aviso previo, donde revisa sus documentos de adhesión, los estados de cuenta y la publicidad de los productos financieros que ofrece.
Pero no todo fueron malas noticias para Inbursa, la séptima entidad financiera por activos del país, y que alcanza una participación en el mercado de crédito a las empresas de 8.8%.
Al cierre de 2017, registró un crecimiento de 60.7% en su utilidad neta, hasta 20,038 millones de pesos (MDP), impulsada por el aumento de 185.5% en su negocio de pensiones y el crecimiento de 117.3% en su operadora de fondos de inversión, así como por una mejora en su margen financiero de 18.7%.
Además, está creciendo en su negocio de préstamos al consumidor gracias a una alianza con Walmart. Según un análisis de Nau, firma británica especializada en mercados de Latinoamérica, la cadena de tiendas podrá ayudarle a reducir su índice de morosidad.
Inbursa cuenta con seis actividades: banco, seguros, fianzas, Afore, inversora bursátil y crédito al menudeo. Entre ellas destacaron los fondos de inversión, que dieron a sus clientes rendimientos de 16.05%, más que la Bolsa Mexicana de Valores, que cerró el año con 10.94%, y que el índice estadounidense, el Dow Jones, con 9.01%.
FUENTE Grupo Carso
Luego del temblor del 19 de septiembre, cuatro tiendas de Grupo Sanborns se vieron afectadas en la Ciudad de México. En el centro comercial Galerías Coapa que aún se encuentra cerrado, operaba el cuarto Sears más importante para la cadena.
A pesar de la contingencia, el año pasado la empresa logró la ampliación de su piso de ventas en 1.8% y tuvo ingresos por 49,768 millones de pesos, un aumento de 4.6% respecto a 2016. En total, Grupo Sanborns estrenó nueve tiendas, seis de ellas con formato iShop, donde vende los productos de la marca Apple.
“2017 fue un año de desafíos, especialmente en el último trimestre del año, debido a los daños ocasionados por el sismo de la Ciudad de México, considerando que más del 40% de nuestras tiendas se encuentran ubicadas en la zona metropolitana. Los primeros días permanecieron cerradas de manera temporal 28 tiendas para revisión, aunque todas reabrieron sin tener daños”, destacó Carlos Slim Domit, presidente del consejo de administración de la empresa, en una conferencia ante inversionistas y analistas
El sismo también afectó a la empresa en uno de sus principales objetivos: mejorar la eficiencia en la distribución de sus mercancías para las diversas tiendas en las 56 ciudades del país donde está presente. El centro de distribución de Sears, por ejemplo, no pudo operar en toda su capacidad durante varios meses.
Ahora, la compañía tiene en agenda 14 remodelaciones y 16 aperturas de tiendas en sus diferentes formatos. Con ello, quiere revertir unos resultados “débiles”, según un análisis de Barclays. La firma británica destaca que el aumento en el índice de morosidad y los costos por cierres y apertura de algunas unidades están frenando las cifras de la empresa.
“Seguimos preocupados por su potencial de crecimiento”, afirma.
El aumento en la extracción de cobre y la subida del precio internacional de los metales ayudaron a Minera Frisco a compensar la caída en su extracción de oro (de –16%) y plata (–7%) durante 2017. Por ello, la empresa reportó un aumento de 7.3% en sus ventas, a 14,869.7 millones de pesos.
No fue suficiente para convencer a los inversionistas. El año pasado, la minera de Carlos Slim fue la única del sector en México, entre las que cotizan en Bolsa, que registró un descenso en el precio de sus acciones, al perder cerca de 27% en esos 12 meses.
Según Rodrigo Heredia, analista de Ve por Más, esto se debió a que los resultados financieros de la firma estu- vieron por debajo de lo esperado.