Política Monetaria vs Política Fiscal

Las política monetaria y fiscal son las herramientas que tienen los países para impactar de manera positiva a sus economías y lograr atenuar las caídas comprendidas en los ciclos económicos, sin embargo, en el caso de México, observamos que ambas toman caminos diferentes, dificultando que sus operaciones tengan un mayor y mejor impacto en la producción nacional. Conoce a detalle cómo impactan a la actividad productiva ambas políticas a cargo de Banxico y Hacienda.

Por Alejandro Rosas

Política Monetaria

Para tener estabilidad en el poder adquisitivo, el Banco de México opera a través de la venta y compra de bonos y con ello incidir en la cantidad de dinero en la economía y ajustar su tasa de interés. Un aumento en este instrumento desincentiva la inversión física, pero mejora el nivel de precios de la economía. Banxico tiene como objetivo inflacionario una tasa anual de 3% +/- un punto porcentual.

Dinero constante

La base monetaria es la cantidad de dinero que hay circulando en una economía. Entre 2010 y el segundo trimestre de 2019, la base en México se ha duplicado. Cuando hay más dinero en circulación la tasa de interés tiende a disminuir.

El impacto

El indicador de Actividad Industrial para la minería es el que más ha sufrido por la desaceleración económica. Y si consideramos que en México la política monetaria ha sido restrictiva (ha aumentado la tasa de interés), concluímos que este sector no ha tenido los incentivos para reactivarse. Cabe mencionar que Banxico no tiene un objetivo dual (inflación y crecimiento), por esta razón no orienta su política monetaria para afectar positivamente al crecimiento económico de manera directa.

Cabe mencionar que Banxico no tiene un objetivo dual, por esta razón no orienta su política monteria para afectar positivamente al crecimiento económico de manera directa.

Financiamientos

Al tener una tasa objetivo alta (cercana al 8%, pero con tendencia a la baja), se puede observar que los costos de los créditos personales y microcréditos han sufrido disminuciones en los últimos 8 años. La tasa promedio del sistema financiero fue de 39.8% en junio de 2019. Los bancos comerciales con las tasas menores son CitiBanamex y BBVA con el 23.5% y 23.7% respectivamente.

Hipotecas

La tasa promedio ponderada de los créditos por hipotecas oscila entre 8% y 10%. El banco Santander es la institución con la menor tasa en este tipo de financiamientos en los diferentes montos, siguiendo de HSBC y Mifel. Es importante mencionar que las variaciones no afectan negativamente los créditos ya otorgados a una tasa fija, solamente cuando son variables.

Política fiscal

La política fiscal ha sido incapaz de reactivar la economía. Los ingresos son insuficientes para hacer frente a las obligaciones del Estado. El PIB y los gastos públicos han crecido entre 2.1% y 5% en promedio anual entre 2010-2018. Todo esto provoca la necesidad de la implementación de una política contracíclica que reanime a las actividades económicas.

Falta sincronización

Al analizar la relación PIB/Gasto público podemos inferir que la política fiscal no ha incentivado a la actividad económica. Con el PIB de 2010 (14 bdp) se podían cubrir seis veces el gasto público (2.6 bdp), pero en 2018 esta cifra bajó a cinco veces. El incremento acumulado del PIB fue de 24%, mientras que los gastos subieron en 55%. La política monetaria restrictiva ha desincentivado a la inversión física y desacelera a la economía. Es importante que haya una mayor coordinación entre las políticas fiscal y monetaria para poder generar incentivos eficaces y perdurables a los indicadores macroeconómicos.