“Será el proyecto más importante del hemisferio”: Alejandro Murat, gobernador de Oaxaca.
ALEJANDRO MURAT. El gobernador de Oaxaca habla de una oportunidad histórica para el estado, que implica un avance estructural de fondo. / Foto: Cortesia
Por Alberto Bello
En el kilómetro 170 del Ferrocarril del Istmo de Tehuantepec, rodeada de selva baja, las ramas de un árbol atraviesan el techo y las paredes de una estación de los tiempos del porfiriato. Es uno de tantos apeaderos hoy desiertos que en la ruta ferroviaria que, alguna vez, compitió con el Canal de Panamá. Un reflejo de más de un siglo de olvido para la región que pronto podría quedar atrás.
“Estamos ante la más importante oportunidad que ha tenido Oaxaca en la era moderna para dar un salto estructural de fondo”, afirma Alejandro Murat, gobernador del estado, en entrevista. “El equivalente a un cambio tecnológico o de modelo de negocio para una empresa”.
En el corazón de esta transformación hay cuatro proyectos estratégicos que son “parte de lo mismo”: solucionar la conectividad de un estado en el que se tarda cinco horas en ir de una a otra de sus ocho regiones.
La modernización del ferrocarril federal detonará la logística regional. / Foto: Alberto Bello
El Corredor licitará los 200 Kms de ferrocarriles del Istmo en 2020. / Foto: Alberto Bello
El Corredor Interoceánico, que Murat considera “el proyecto logístico más importante del hemisferio”, conectará los puertos de Salina Cruz en el Océano Pacífico oaxaqueño con el puerto industrial de Coatzacoalcos en el Golfo veracruzano, con una infraestructura ferroviaria modernizada y un proyecto de desarrollo integral para la región. Uno de sus objetivos será mover parte de la carga de las compañías mexicanas, que hoy representa 15% del negocio del Canal de Panamá. Además incluye polos de desarrollo de acuerdo con las actividades económicas de varias regiones, una inversión de 5,000 millones de pesos (mdp) en el puerto de Salina Cruz.
Este eje, explica Murat, se complementa con la conclusión del tramo de 104 km que unirá Barranca Larga y Ventanila, conectando la capital de Oaxaca con la costa. Otra autopista conectará Oaxaca con el Istmo, mientras que la modernización tosa permitirá unir el puerto de Salina Cruz con Coatzacoalcos.
Para atraer las inversiones, Murat defiende que la ecuación que ofrece Oaxaca tiene mucho más que la conectividad: la perspectiva energética. “Produciremos la energía más barata del país en esquemas de cogeneración. Esto es sinónimo de desarrollo industrial”, dice Murat.
Oaxaca produce el 65% de la energía eólica del país. / Foto: AFP
El gobierno del estado promueve una visión de la inclusión para resolver los conflictos que, en ocasiones, ha frenado las inversiones en Oaxaca. “Cuando hablas de grandes proyectos estratégicos la parte más importante es la inclusión de todos los actores. No puede haber beneficio para algunos y para otros no, y en esta ecuación, un ejemplo: creamos el consejo de energía eólica; creamos un impuesto que pagan las empresas y se canalizan a los municipios”, explica Murat.
Para promover la aceptación del corredor entre los 46 municipios que atraviesa en el estado, de los cuales ocho son de pueblos indígenas.
En paralelo, se multiplican las reuniones con empresas, desarrolladores y la agencia de Singapur de infraestructura portuaria y logística urbana Jurong, para demostrar las alternativas que ofrece. A cargo de esto está Pedro Matar, coordinador de Relaciones Internacionales del gobierno de Oaxaca.
La ruta del ferrocarril tiene estaciones históricas. A partir de ellas pueden desarrollarse rutas turísticas. / Foto: Alberto Bello.
El Corredor Interoceánico es una empresa del gobierno federal descentralizada, dirigida por Rafael Marín, a la que se incorporaron las administraciones integrales portuarias (APIs) de Salina Cruz y Coatzacoalcos y la empresa Ferrocarriles del Istmo de Tehuantepec.
Marín reporta directamente al presidente Andrés Manuel López Obrador, que ha hecho 11 visitas a Oaxaca desde el principio de su administración.
Dentro del clima de colaboración, Oaxaca impulsó la firma de un convenio con Veracruz y la creación, entre ambos estados, de un fideicomiso para el corredor. “Tenemos dos frases para mi gobierno: desde lo global queremos más de Oaxaca en el mundo y más del mundo en Oaxaca y decimos también que la política no sirve si no sirve a la gente”. Dos frases que podrían hacerse realidad muy pronto.