Por: Mario Alberto Verdusco
¿Se puede tomar una buena decisión de vida en 9.58 segundos? A veces sí y a veces no, dice Usain Bolt, pero fue el tiempo que a él le tomó convertirse en una leyenda, el momento en el que los flashback resumieron sus días, meses y años de sacrificio, y el instante en el que el mundo vio nacer a un nuevo ídolo del Olimpo.
Fue el 16 de agosto de 2009 cuando el mundo fue testigo de lo que parecía imposible: el joven jamaiquino, de 22 años, se colgaba la medalla de oro en la prueba de 100 metros en el Mundial de Atletismo de Berlín, Alemania.
En una emotiva carrera, en la que enfrentó a los tres hombres más rápidos de la historia, Bolt se llevó la competencia con 41 zancadas que le sirvieron para establecer un récord mundial, hasta ahora imbatible, en esos 9.58 segundos. El segundo y el tercer lugar fueron para los estadounidenses Tyson Gay, con 9.71, y Asafa Powell, con 9.84, respectivamente.
Cuatro días después, Usain Bolt la rompía nuevamente. En su prueba favorita, los 200 metros, impuso otra marca mundial, con 19.20 segundos.
El padre de los juegos olímpicos, Pierre de Coubertin, pronunció en 1896 el lema del espíritu ganador Citius, altius, fortius (locución latina que significa ‘más rápido, más alto, más fuerte’). Seguramente, desde algún plano de la trascendencia, el francés veía orgulloso cómo este atleta, de 1.95 metros, se adueñaba de una de esas habilidades: la del hombre más veloz del mundo.
Usain Bolt visitó México para presentarse como el nuevo Chief Sprint Officer de KIO Networks, empresa que lanzó la campaña ‘One Step Forward’ que busca acompañar a organizaciones y negocios para la aceleración digital. El exvelocista aprovechó su estancia para comer quesadillas, un platillo al que no puede resistirse, y también, aunque a velocidad relámpago, concedió cinco minutos para una carrerita (entrevista) con Expansión.
EXPANSIÓN: ¿Cómo te sientes tras el retiro? ¿Qué tan difícil ha sido dejar las pistas?
USAIN BOLT:
Creo que durante los tres primeros años fue muy duro ver la competición fuera de las pistas, pero pienso que, después de eso, más o menos lo acepté. De todos modos, para mí, sigue siendo bueno ver la competición y lo que pasa en el deporte.
En una pequeña sala de un hotel en Santa Fe, en Ciudad de México, Bolt responde rápido pero conciso. Él, mejor que nadie, sabe que el tiempo es oro, como ese que se colgó 23 veces en su carrera profesional.
Si bien se le ve serio y pensativo cuando se le pregunta por los tiempos que corrió en la pista, el jamaiquino también se percibe feliz y tranquilo con su vida actual.
Desde su retiro, en 2017, Lightning Bolt (‘relámpago’, en español), como también se le conoce, no se ha quedado quieto. Abrió su propio restaurante (Usain Bolt Tracks and Records), estableció la fundación Usain Bolt y creó su propia marca de ropa junto con Puma.
Pero la nueva faceta que más disfruta es la de ser un hombre de familia. Junto con su esposa, Kasi Bennett, formó una familia con dos niños y una niña que lo tienen, dice, “muy ocupado”.
Vestido con traje negro y camisa y tenis blancos, Bolt entra a una etapa más personal que deportiva en las siguientes preguntas.
E: ¿Cuáles fueron los sacrificios que te llevaron a la gloria y qué sugieres a los jóvenes para alcanzar sus sueños?
UB: El sacrificio siempre jugará un papel importante a la hora de tener éxito. Por ejemplo [cuando recortas], el tiempo en familia, pasas mucho tiempo solo, tienes que dejar de socializar y hay un momento en el que quieres ayudar a amigos o familiares. Como he dicho, tienes que decirles la verdad, “escucha, tengo que hacer esto, este es mi plan y este es el viaje que voy a emprender”, y a veces pierdes amigos en el camino porque estás muy centrado en tu objetivo. Así que, muchas veces, si quieres algo, tienes que sacrificar.
E: ¿Qué es lo más importante para triunfar, un fuerte arranque, una velocidad constante o tener siempre la meta clara?
UB: Creo que, para mí, los objetivos siempre estuvieron claros, sabía lo que quería. Como velocista no era alguien que arrancara fuerte, así que no se me daba bien empezar, pero creo que marcarse un objetivo cada año, como siempre lo he dicho, por pequeño que sea, es importante, y yo me marcaba objetivos cada año, pero tenía un gran objetivo por el que trabajaba. Así que creo que marcarse objetivos es muy importante.
Antes de entrar a una carrera, a Bolt se le veía convivir muy frecuentemente con los ayudantes, muchos de ellos, jóvenes ilusionados de ver a su atleta favorito, a su ídolo. A muchos les chocó el puño, a otro le regaló su gorra y no faltó quien recibiera los tenis con los que el velocista conquistó las pistas.
Hubo un camarógrafo que, en su tarea por tener la mejor imagen del campeón, terminó tirando accidentalmente al jamaiquino. “Intentó matarme”, dijo Bolt en broma. Esa es otra característica de la leyenda. La que trasciende fuera de las pistas.
E: ¿Consideras que la humildad es una virtud que todo deportista, líder, empresario, profesor o padre debe tener para ser un ejemplo?
UB:
Sí, definitivamente. Creo que si eres una figura pública, de cualquier manera, es tu responsabilidad ayudar a guiar a los niños del mundo. Ya sabes lo que quiero decir, dar un gran ejemplo sin saber que puedes moldear la vida de tantas personas, sin siquiera saber el efecto en sus vidas.
Y es por eso que trato de vivir una vida respetuosa, trato de devolver, trato de sonreír, trato de hacer todo lo positivo, trato de estar ahí fuera porque a veces recibo tantos mensajes de personas que dicen: “Oye, gracias por todo”, “realmente me inspiraste a hacerlo bien”, “simplemente te doy las gracias por ser tú”, “eres tan humilde”. Así que entiendo lo que significa ser quien soy, creo que la humildad y la normalidad son muy importantes.
E: ¿Cómo quieres que te recuerden?
UB: Como uno de los mejores deportistas que han hecho deporte. Quiero estar entre los grandes, como Muhammad Ali, Michael Jordan, Michael Johnson, todos estos grandes atletas. Esta es la razón por la que trabajo tan duro, que cuando estén teniendo una conversación acerca de las más grandes estrellas del deporte en el mundo, voy a estar entre ellos.
Entre campeonatos mundiales, juegos olímpicos, relevos, Juegos de la Mancomunidad y otras competencias, Usain Bolt ganó 23 medallas de oro, cinco de plata y una de bronce.
Han pasado 14 años desde que rompió las marcas de 100 y 200 metros en atletismo y no se ve, al menos en el tiempo cercano, al deportista que quiera arrebatarle el título de “el hombre más veloz del mundo”.
Su nombre está al lado de íconos del deporte, como Nadia Comaneci, Yelena Isinbayeba, Simone Biles, Serena Williams, Michael Jordan, Tom Brady, Michael Phelps o Muhammad Ali.
Pero fuera o dentro de las competiciones, los atletas deben ser ejemplo. Es por eso que a Bolt se le pidió que mandara un consejo para quienes sueñan con volar alto como él.
E: Como ícono mundial has inspirado a innumerables atletas y aficionados. ¿Qué mensaje o consejo darías a los atletas nacientes que sueñan con seguir tus pasos y llegar a lo más alto en sus respectivos deportes?
UB: Simplemente, que sean dedicados, que nunca se rindan, que aprendan de sus errores y también que entiendan que el camino no será fácil. Nunca es fácil, dedícate a lo tuyo.
E: Usain, tu personalidad y tu carisma te han convertido en una figura muy querida, tanto dentro como fuera de la pista. ¿Cómo equilibras las exigencias de ser un atleta de alto nivel con el mantenimiento de una imagen positiva para tus seguidores?
UB:
Simplemente, he sido yo mismo. Quiero decir, mi padre es el carismático en mi familia, le encanta reír y hacer bromas a veces. Eso lo heredé de él, es mi personalidad. Nunca ha sido una pose, una actuación, así que era fácil ser yo mismo en todo momento. ¿Me entiendes? Sonriendo, riendo, viendo hacia fuera.
Así que nunca fue una presión para mí salir y actuar como: “¡Oh, me estoy divirtiendo!”. En realidad, me estaba divirtiendo, así que, para mí, fue fácil y lo disfruté, y como dije antes, entiendo que necesitas ser un gran reflejo de tu educación en casa.
Es la recta final de la entrevista. Han pasado los cinco minutos que se ofrecieron y nos lo hacen saber, pero Bolt nos enseñó en sus competiciones a estirar la cabeza para ganar, aunque sea, en este caso, una última pregunta antes de llegar a la meta. Lo logramos.
E: ¿Se puede tomar una buena decisión de vida en 9.58 segundos?
UB: A veces sí y a veces no. Pero en la vida como en el deporte, para eso se entrena. Hay una cosa que se llama memoria muscular. Si entrenas tu cuerpo para hacer algo, simplemente reacciona de forma natural porque tu mente y tu cuerpo están en sincronía. De cualquier forma, si te equivocas, siempre hay una carrera más. Nunca se rindan.
Ahora sí, termina la carrera. Un apretón de manos cierra el encuentro. La grabadora dice que duró 6:21 minutos. Le ganamos por poco más de un minuto. Él ya tiene muchas medallas, y nosotros nos colgamos una que es intangible: su legado y su filosofía como leyenda y líder a través de sus palabras. Entrevista en tiempo récord… oro para los lectores.
ANIMACIONES Nayeli Araujo / DISEÑO Y PROGRAMACIÓN WEB Nayeli Araujo / COORDINADORA DE FOTOGRAFÍA Betina Garcia / FOTOGRAFÍA Rafa Montiel