Los algoritmos están en casi cualquier interacción que tienen los usuarios en internet y están cambiando la forma en la que se consume y se crea música.
Por: Eréndira Reyes
Muy cerca del emblemático cruce de Shibuya, en la ciudad de Tokio, Japón, se encuentra Tower Records, una tienda de música especializada en vinilos y CD que ocupa ocho pisos de un edificio. Su fachada amarilla es llamativa, pero lo es aún más la experiencia al interior, adonde miles de personas asisten cada día para descubrir nueva música y adquirir productos de coleccionistas. Aunque cada uno de sus pisos es temático, el séptimo está dedicado a nuevos sonidos. Ahí fue donde escuché a Peso Pluma.
En México, Hassan Emilio Kabande Laija –nombre real del cantante y compositor, de 24 años– es uno de los fenómenos más recientes en la cultura musical del país. Nacido en Guadalajara, Jalisco, La Doble P, como es conocido también, empezó su carrera adaptando canciones que había compuesto e inspirándose en artistas regionales, como Ariel Camacho.
Tras lanzar una serie de EP a lo largo de 2020 y 2021, el artista se expandió con ‘El Belicón’, que vio la luz en 2022, una canción de trap acústico que reflexiona sobre la narcocultura de Guadalajara. Desde ahí, 2023 convirtió a Peso Pluma en el artista más reproducido del país en tres de las plataformas más populares: YouTube, Spotify y Apple Music.
Esto le ha traído al artista la posición de headliner en festivales internacionales, como Lollapalooza Argentina, Coachella, fechas en distintos recintos alrededor del mundo o eventos como los Latin Grammy o los MTV Video Music Awards 2023.
Sin embargo, aunque la trascendencia de muchos artistas latinoamericanos llega a algunos escenarios y oídos de Europa y América del Norte, cruzar el Pacífico puede ser más complicado. Pero no imposible, gracias a los algoritmos. Spotify Discovery Mode es una nueva herramienta que ayuda a los artistas a utilizar la inteligencia artificial (IA) para llegar a una audiencia más amplia mediante el análisis de ciertos marcadores, como la retención de audiencia y si las personas compartieron una canción o la agregaron a una lista de reproducción.
La plataforma de streaming utiliza esta herramienta como una oportunidad para obtener una mayor parte de las regalías de los artistas al poder ofrecer su música a más personas. El giro hacia listas de reproducción generadas por IA presenta un cambio en la forma en que las personas escuchan y producen música. Y se replica en otras plataformas.
“Ahora es igual de relevante que un artista piense en qué clip de la canción se usará en redes sociales para poder darse a conocer, por lo que la tendencia de formatos más breves es algo que está impactando a la industria musical”, señala Karla Agis, gerente de Cultura y Tendencias de YouTube Latinoamérica.
Este formato es parte del éxito que han experimentado canciones como ‘Ella baila sola’, de Peso Pluma. Agis apunta que este camino de la industria musical también empieza a crear géneros menos limitados y más disruptivos. “Si vemos el ranking de los videos que más se vieron en la plataforma, hay un factor en común: las colaboraciones. El 98% de las canciones más exitosas fueron aquellas donde los géneros se difuminan y dan paso a experimentos que hace años no hubiéramos imaginado”, afirma la vocera de YouTube.
Dentro del ranking de la plataforma de videos de 2023, nueve de los 10 más vistos fueron colaboraciones entre artistas de regional mexicano, reguetón y pop, pero además fue el primer año en que otro género distinto al reguetón tomó el primer lugar de lo más popular. Lo mismo sucedió en Spotify o Apple Music, donde La Doble P superó a artistas como a las surcoreanas Blackpink.
Pero ¿cómo funcionan estos algoritmos? Una de las principales fuentes de data es saber el tiempo que los usuarios están oyendo una canción, si la repiten, desde dónde están escuchando la música y la permanencia en la canción.
Aunque las plataformas no hacen públicos los datos que pueden compartir con disqueras o especialistas en música, la interacción que tienen los usuarios genera playlists más populares en cada país, que son curadas por expertos de las plataformas y herramientas de IA.
Pink Floyd lanzó la canción ‘Echoes’ en 1971, que tiene una duración de 23 minutos y 30 segundos. Hoy, la brevedad es uno de los ingredientes de la fórmula del éxito. Una herramienta creada por un estudiante de la Universidad de California (UCLA) llamada Spotify Pie Chart –que, posteriormente, se viralizó a través de una app en 2022– registró que la duración promedio de las canciones en Spotify era de 3 minutos y 17 segundos, mientras que en 1990 la duración era de 4 minutos y 19 segundos.
Además, al analizar un conjunto de datos de 160,000 canciones extraídas de la API de Spotify, los investigadores de la UCLA llegaron a la conclusión de que la tendencia era ser más breve para ser más exitoso. Y especulan que la capacidad de atención de los oyentes de música ha disminuido, con tantas vías de entretenimiento a su alcance, además de que los algoritmos podrían promover pistas más cortas que se escuchen en su totalidad para mantener interesada a su audiencia.
Dentro de las 10 playlists más populares de la plataforma en México hay una variedad de géneros que van desde el regional mexicano hasta una selección dedicada a Bad Bunny. “Ya sea que sirvan para conocer más sobre un género, un artista, o para acompañar a los fans en momentos icónicos.
En el momento de la fiesta, en el momento del perreo o en el momento de la nostalgia. En general, constituyen una curaduría muy fina de canciones y sonidos que pueden generar emociones y sensaciones según la temática”, precisa Spotify a Expansión.
Una razón por la que la brevedad ayuda a que se conozcan mejor las canciones o artistas de este tipo de géneros nuevos es el social media. “Los usuarios acceden, principalmente, a través de sus smartphones para entretenerse, ya no sólo usan estos dispositivos para poder comunicarse, sino que se han convertido en una extensión para ver videos o escuchar música a donde vayan”, señala Geana Barbosa, directora regional para América Latina y el Caribe de Hootsuite.
Cuando TikTok llegó a países como México, tuvo un foco especial con los creadores de música, y artistas como Kenia Os o Kimberly Loaiza han logrado lanzar carreras musicales con más rapidez, gracias a sus métricas de redes sociales, señala Barbosa.
Un informe de la consultora The Competitive Intelligence Unit (The CIU) publicado el pasado diciembre señala que el consumo de contenidos musicales a través de streaming registró un ascenso en 2022 (el último año con datos completos), cuando la frecuencia de uso de plataformas digitales de música por suscripción registró un promedio de 5.7 días a la semana, lo que significa que un 71% de los usuarios ingresa todos los días, mientras que el 21% lo hace dos veces por semana, el 6%, una vez a la semana, y el 2%, cada dos semanas.
“La masificación en la tenencia de smartphones entre los usuarios mexicanos, la posibilidad de descargar los contenidos en estos, así como la mejor interactividad y experiencia de usuario a través de aplicaciones móviles, coloca a estos servicios a la cabeza en términos de preferencia para acceder a las plataformas digitales de audio, por encima del resto de los dispositivos”, señala Radamés Camargo, coordinador de Comunicación de The CIU.
Una aplicación móvil que empezó a tener mucho empuje por el género regional mexicano fue Trebel, que dentro del ecosistema de audio en México se volvió relevante en los últimos dos años. La app se lanzó en Los Ángeles en 2018 y, de acuerdo con The CIU, en 2022 ya tenía el 3% de la cuota de mercado de México y está por arriba de aplicaciones como Deezer, que llevan más años existiendo.
Trebel no cobra a los usuarios por descargar música a sus dispositivos y en América Latina, donde los ingresos son más escasos, los datos de telefonía son caros y la demanda de aplicaciones de música es alta, esta gratuidad es un punto de inflexión para muchos. Hasta el primer trimestre de 2023 tenía 13 millones de usuarios activos mensuales, según sus propios datos. Por lo que obtener el hit del momento empieza a impulsar nuevos negocios.
“La conexión entre lo que está viendo un usuario en redes sociales o en apps de video y la interacción con esa música genera que el consumo de contenidos sea distinto a como se generaban campañas por lanzamientos de música antes. Ahora muchos identifican hits por un video, y si lo pueden encontrar fácil para identificar la canción, podrán ubicar al artista”, precisa Agis.
Por ello, apunta la vocera de YouTube, el concepto de crear un disco completo puede quedar en una segunda prioridad para el lanzamiento de una canción, pues entre las colaboraciones y la viralización de música en redes, la música se crea a través de un fin de brevedad.
FOTOS Getty Images / FOTOARTE Y TRATAMIENTO TIPOGRÁFICO Rodrigo Heredia / DISEÑO Y PROGRAMACIÓN WEB Pamela Jarquin Rojas / ANIMACIÓN: Nayeli Araujo