FOTO: RAFA MONTIEL

Lucero Santiago

Cofundadora y directora ejecutiva
Kmagazine y Byeol Media Inc

32

años


Por: Alejandro Bazán

P

ocas personas logran saber desde la niñez cuáles son los sueños que desean cumplir cuando sean grandes y Lucero Martínez es una de ellas. Desde los 12 años supo y quiso que su vida estuviera marcada por la cultura surcoreana y, ahora, se ha convertido en una de las encargadas de construir un puente entre esa nación y México.

Primero lo hizo con K-magazine, uno de los medios pioneros en español especializado en la cultura coreana (un fenómeno que tiene un impacto en más de 170 millones de seguidores a nivel global) que fundó en 2015 con sus socias Galilea Herrera y Alix Saavedra. En 2019, su crecimiento les llevó a organizar, junto con el Museo Nacional de las Culturas del Mundo, en Ciudad de México, el Hallyu Fest, un festival que atrajo también la atención de varias marcas.

Un año después, fue seleccionada entre más de 2,000 empresas de todo el mundo por el gobierno surcoreano como la primera emprendedora mexicana en el programa de aceleramiento K-Startup Grand Challenge. Esto permitió a las socias crear Byeol Media, que llevó a Martínez hasta Corea del Sur, donde hoy vive. Desde ahí ha logrado despertar el interés de empresas como OCESA para realizar en México espectáculos de K-pop y también para que el mercado surcoreano conozca productos nacionales más allá del Día de Muertos y el tequila.

Hay muchos factores que le han servido de inspiración. El k-drama (como se denomina a las telenovelas surcoreanas) Sonata de invierno fue uno de los principales detonadores. Otros fueron la vestimenta, los colores, la gastronomía y la historia. “[Todo] esto me incitó a querer saber más de la historia surcoreana”, cuenta.

Pero no todo ha sido miel sobre hojuelas, pues también ha tenido que lidiar con los contrastes culturales en el tigre asiático, como el machismo, el idioma y la manera de hacer negocios. “Lo más difícil para mí fue el idioma. Es una barrera muy grande porque aunque es un país avanzado y desarrollado, el inglés se usa muy poco”.

Sus planes para el mediano plazo son ambiciosos, pues entre ellos está el poder hacer un festival o un concierto masivo de K-pop para los fans mexicanos: “Yo quiero que Corea del Sur y los países asiáticos no le tengan miedo a esa distancia que nos separa, así como a la mala información que existe sobre México, y que se atrevan a abrirse más. Ese es mi sueño”. Además, en colaboración con la Academia de Estudios Coreanos lanzaron el programa ¡Hola K-Culture!, que beca a personas mexicanas para que aprendan sobre cultura del país asiático.

Mi tarea más grande fue llegar y decirles ‘yo soy mexicana’ y este es un mercado en el que ustedes pueden y deberían estar. ¿Por qué? Porque tenemos estos conciertos, una grandeza cultural y muchos eventos, muchísimos festivales.

Martínez desea ser una buena embajadora mexicana en el exterior, pero, sobre todo, en un mercado asiático que está ansioso de conquistar el mundo y que, a su parecer, no sólo debería mirar a EU.