CON SOLO 25 AÑOS, KEVIN ÁLVAREZ, LATERAL DERECHO DEL AMÉRICA, YA SUMA TRES TÍTULOS NACIONALES Y UNA PARTICIPACIÓN EN UN MUNDIAL, EL DE QATAR 2022. ESTA ES LA FORMA DE VER EL MUNDO DE UNA DE LAS NUEVAS CARAS DEL FUTBOL MEXICANO

Texto: Jomi Ávila
Fotos: Alonso Díaz

¿Qué tanto puede cambiar la vida de una persona en dos años? El tiempo es relativo cuando se trata de nuevas experiencias, y el ascenso acelerado de la carrera de Kevin Álvarez es un grandioso ejemplo.

“La única constante es el cambio” puede ser una frase trillada, pero en el caso Álvarez se antoja como una verdad irrebatible. Pasó de ser una promesa en Pachuca a ser bicampeón del fútbol nacional y jugar su primera Copa del Mundo con México.
El canterano de los Tuzos conversó con Life And Style sobre su nueva vida, las metas a largo plazo y otros aspectos que marcan su día a día más allá del balón y las canchas profesionales.



MADURACIÓN

Los años de Kevin Álvarez como juvenil no fueron del todo positivos. Le tocó aguantar mucho para recibir oportunidades, y aunque se mantuvo firme, hubo episodios que le hicieron considerar abandonar su sueño. Las dudas lo tentaron. “Estuve 14 años en Pachuca, llegué a los 10... De ese grupo de veintitantos niños, solo llegamos unos tres o cuatro a Primera División, pero ahora ya solo jugamos dos”, recapitula.

Probablemente ahí, en esos años difíciles y de alta competitividad, nació la personalidad que hoy conocemos. Serio pero curioso, con gran capacidad para reír y hacer valer su sentido del humor. También firme, pero sin miedo a demostrar cómo se siente y lo que lo mueve por dentro.

La certidumbre futbolística le llegaría después, cuando las oportunidades comenzaron a aparecer. Desde luego, él las aprovechó. Kevin Álvarez es una muestra de que la paciencia, casi tanto como la disciplina, son virtudes que no pueden faltar en un futbolista moderno. “Estoy contento de haberle cumplido a mi papá la promesa de llegar a Primera División, pero aún le tengo más, tengo que seguir trabajando”, añade quien lleva tatuada en el cuello la frase STARTED WITH A PROMISE (Comenzó con una promesa) en honor a este pacto de sangre.
Su padre no alcanzó a verlo jugar profesionalmente, pero solo de imaginar el orgullo que sentiría por saber que ha cumplido su sueño, Álvarez se motiva.



Debutó en la Liga MX durante la temporada 2019 con Pachuca y a las órdenes de Martín Palermo. El histórico delantero del Boca Juniors, en su etapa como técnico de aquel equipo, fue quien le dio la oportunidad de subir, una chance que ya no soltó. Con Tuzos, su casa deportiva y con quienes siempre estará agradecido, Kevin perdió una final y luego ganó su primer campeonato, el torneo de Apertura 2022.

Aquel año, su vida cambió para siempre. Logró ese primer título con Tuzos, jugó el Mundial de Qatar con México y fichó por el Club América, el equipo más importante del país. Con esos logros, también llegó una fama que no solía experimentar antes. “En Pachuca salía y, al jugar en Primera División, la gente me reconocía. Pero en 2022 sí llegué a un punto en el que ya no podía ir ni a las plazas. No es que no me la pasara bien, pero iba caminando y me tomaban fotos todo el rato. Ahora se ha estabilizado un poco, pero antes, al principio, cuando regresé del Mundial, me agarraban comiendo, me pedían fotos en todas partes”, comparte.
Más allá de las fotos y los autógrafos, Kevin también destaca la posibilidad de conocer a gente que antes solo veía en la tele, como deportistas y famosos. Experiencias que antes no pensaba vivir. “Por ejemplo, conocer a Piqué, una figura mundial del futbol. Alguien que vi y admiré por mucho tiempo y, de repente, tenerlo ahí al lado, preguntándote tontería y media, como de tú a tú. Esas son vivencias que me gustan y por eso trato de buscarlas”, añade el lateral mexicano.

Tank top, Calvin Klein; collar, Bold.


Kevin reconoce que, con la fama y el spotlight que otorga ser futbolista profesional y formar parte de un equipo mundialista, las redes marean y es fácil perder el piso. Por eso, involucrarse en otras actividades y pasar tiempo con su familia, lo ayudan a estabilizar su día a día. Así, después del Mundial y su campeonato con Tuzos, una oferta del América llegó a su puerta. El joven, en sus veintes y con una carrera despegando recientemente, no dudó aceptarla. Se mudó de Hidalgo a la Ciudad de México y ahora cosecha títulos vestido de azulcrema.

Desde que firmó con el Club América, su familia se mudó con él a la capital. “Me ayuda bastante a controlarme, a sentirme apapachado, a no estar solo. En mi caso, mi madre me apoya para comer balanceadamente, estoy más centrado en el deporte. Llega un punto en el que todo se vuelve un poco más atareado y lo que menos quieres es dedicarle tiempo a otras cosas que no sean el futbol”.



Pero el balance entre el trabajo duro y el tiempo libre es importante. Por eso, junto con algunos de sus compañeros del América, Álvarez tiene un proyecto que le ayuda a relajarse y a estar en contacto con los fanáticos del club: la Triiisecta. Este podcast (o proyecto, como a él le gusta llamarlo) lo comparte con Miguel Layún e Igor Lichnovsky y le da un respiro, así como la oportunidad de mostrarle a la gente un poco más de su personalidad e intereses. Este stream de los americanistas, en donde se platica de cualquier tema que se proponga al momento y se interactúa con la afición, ha crecido mucho e incluso ha recibido críticas del público, pero no representa un distractor, como el mismo Álvarez refiere. “Las críticas son porque algunos creen que te distraes, que te dejas de enfocar en el futbol. Dicen cosas como ‘Dedícate a lo que en realidad importa’. Pero bueno, son personas que no entienden de futbol. Yo les digo que eso ya lo hacía sin grabarme, compartir con mis amigos, jugar videojuegos... Ya lo hacía. La diferencia es que ahora nos juntamos y nos grabamos", comparte Álvarez.

La Triiisecta continuará sus emisiones en 2024. Quizá los capítulos variarán en fechas por el ajetreado calendario de los futbolistas, pero es su intención seguir creciendo y sumando a invitados. Lo que llama la atención de la gente es, en palabras de Kevin, que son ellos mismos. No escriben guiones ni preparan temas, quizá uno que otro anuncio importante o comunicación necesaria para el programa, pero las interacciones y las pláticas no se planean. A pesar del éxito del show y de la popularidad de la que goza ahora, Kevin asegura que no es muy bueno con las redes sociales, aunque ha aprendido a convivir con ellas. Son parte de ser una figura pública. “Soy malo, podría mejorarlas bastante. Sinceramente, por como fui avanzando con ellas, me vi obligado a subir cosas, pero nunca he sido bueno. Intento subir contenido sin que se vea forzado. Sí me gusta, pero no tengo la imaginación de otros creadores de contenido”. ¿Y los haters? “Entiendo que lidiar con ellos es parte de, no me frustro. Cuando peor estaba, es cuando la gente peor me trató en redes. Pero le das la vuelta, lo aceptas y vives con eso”.

Top y pantalón, COS; tenis, Hermès; reloj y anillos, Cartier.


Gorras, shorts, sneakers, tatuajes, calcetas altas, relojes, anillos y prendas oversize suelen completar los atuendos de Kevin Álvarez. En sus streams, en sus paseos, en entrevistas y en el día a día, el futbolista se viste cómodo, pero también busca estar en tendencia. Su relación con la moda es cercana, admite que le gusta ir de compras y lucir de una manera determinada. Las fotos que ilustran estas páginas no mienten: Kevin cuida su imagen y también disfruta estar frente a los flashes. “Me gusta, me gusta bastante. Me gusta la moda y vestirme diferente, sentirme diferente. Si ya mi vida es un poquito diferente, trato de disfrutar”.

Tank top y bóxer, Calvin Klein; collar, Bold.


En lo futbolístico, el año 2024 ha sido agridulce para Kevin Álvarez. Conquistó el bicampeonato de la Liga MX con el América, ganando los títulos del Apertura 2023 y el Clausura 2024, pero una lesión mermó sus aspiraciones personales. Se perdió la Liguilla del Clausura 2024 y la Copa América debido a una pubalgia. Fue operado en el segundo trimestre del año y sigue trabajando en su recuperación. Esta lesión le exigió, incluso, pasar una semana en silla de ruedas, y recuperarse ha sido difícil tanto física como mentalmente. “Estoy a un 75 por ciento. Es una lesión difícil, es muy cambiante, pero ahora me siento bien y estamos avanzando rápido”, comparte el jugador a Life and Style, aunque sin asegurar el tiempo de recuperación que todavía necesitaría. Álvarez es mesurado, sabe que debe ir paso a paso, pero está seguro de que recuperará su nivel, peleará de nueva cuenta por un puesto en las Águilas y, por supuesto, buscará un lugar en la Copa del Mundo 2026. “Sí está en mis objetivos, pero no lo tengo en mente. Yo sé que si me enfoco en otras cosas diferentes, que son más importantes ahora, terminaré llegando ahí.

Look total, Louis Vuitton; reloj y anillos, Cartier.

Recuperarme bien y regresar bien, hay que seguir haciendo las cosas como se debe”, señala. Sobre la llegada de Javier Aguirre y Rafa Márquez a la selección mexicana, Kevin no compartió muchas ideas: “Es gente de mucha experiencia, por lo que creo que van a aportar al proyecto y van a hacer que se cumplan los objetivos”

Así, mesurado pero confiado a la vez, Kevin sabe que tiene el balón en su cancha, y con esa disciplina y constancia que lo llevó a consolidarse en primera, ser seleccionado nacional y pasar al mejor equipo de Mé- xico, puede continuar una carrera de éxitos y oportu- nidades en el futbol. Él es Kevin Álvarez, una de las nuevas caras de la élite futbolística en México, quien pasó de ser promesa en Pachuca a una realidad en el América y en la selección.

Look total: Dolce & Gabbana