El complicado entorno macroeconómico y una débil actividad en proyectos de infraestructura y vivienda afectaron los ingresos de Cemex durante la primera mitad del año en 4%, mientras que el valor de sus acciones también ha descendido 36%, lo que representó el peor desempeño desde 2011. Los analistas consideran que la reducción en volúmenes en productos que reportó la cementera continuará en lo que resta del año; sin embargo, su estrategia se basa en continuar con la venta de activos y la disminución de costos para reducir su deuda.