Foto: Makareno
Beatriz Monteagudo nunca fue muy dada a hablar de su vida privada en el trabajo. Hasta que decidió liderar el grupo ERG Pride de HSBC, la institución financiera en la que trabaja desde 2016, que fomenta y coordina acciones enfocadas a la inclusión, la diversidad y el respeto hacia la comunidad LGBTQ+. “El ingreso a este grupo me hizo prácticamente salir del clóset con todo HSBC y, de alguna manera, con todo aquel que me conociera, si es que todavía tenían alguna duda”, dice.
Pride es uno de los cuatro grupos de afinidad que tiene el banco. “Mi objetivo es crear conciencia en los líderes y puestos directivos sobre el respeto, la inclusión y la solidaridad con los miembros de la comunidad, tanto en nuestro lugar de trabajo como hacia afuera”, explica Monteagudo, quien dirige el área de Estructuración de créditos para industrias enfocadas al sector agroalimentario, metales y de energía. Llevar esta plática a la alta dirección, dice, normaliza las conversaciones e inspira a los demás a sentirse seguros “y con la confianza de ser como son, sin tener que ocultar o fingir algo por miedo a no ser aceptados”.
La empresa ha realizado cursos de conceptos básicos o de lenguaje inclusivo y ha trabajado en manuales para apoyar a personas transgénero. Además, ERG Pride es parte de una campaña para atraer aliados dentro del banco que ayuden a fomentar la inclusión “para que todos seamos agentes de cambio y no solo oyentes”.
A Monteagudo, uno de los retos al entrar, sobre todo, a un trabajo era hacer que las personas se enfocaran en su trabajo y su experiencia, en lugar de que se distrajeran con un ‘¿será gay?’. Para ella, ahora, ya no hay distractor posible. De ser alguien que no hablaba de su vida personal, pasó a que abiertamente en cada correo o comunicación que envía a diario se plasme en su foto y su firma.