Por: Puri Lucena
Las empresas sostenibles atraen al mejor talento. Cada vez más personas, sobre todo, jóvenes, quieren trabajar en compañías con propósito, aunque no sea en un área de sostenibilidad. También el perfil de quienes laboran en estos departamentos ha cambiado. Marta Vegas, responsable de Proyectos de Sostenibilidad de Telefónica Hispanoamérica, señala que se ha profesionalizado. “Antes, llegabas un poco de casualidad y ahora ya hay carreras, diplomados, licenciaturas… Hay muchísima formación interna y externa”, afirma.
La empresa apuesta por la formación continua, tanto en habilidades blandas como técnicas, lo que permite que personas que trabajan en finanzas, por ejemplo, pasen a sostenibilidad en busca de generar más impacto. “Una de las grandes fortunas de Telefónica es que te da la posibilidad de reinventarte y formarte. Y a mí también me viene bien, porque son personas que tienen una visión distinta. Al final, en sostenibilidad tenemos que buscar la diversidad, pensar fuera de la caja y ser innovadores”.
Marta Vegas: Has dado con el punto clave, que es el gobierno corporativo, cómo te aseguras de que la estrategia que has armado se cumpla. Para eso es la estructura, ¿no? En nuestro caso, es un poco compleja, pero reportamos directamente a nuestro vicepresidente en la dirección de Asuntos Públicos, que reporta al presidente de Hispanoamérica.
Y en esa vicepresidencia de Asuntos Públicos hay una dirección de Sostenibilidad, de donde colgamos tres grandes patas: una, dedicada a financiación sostenible; otra dedicada a estrategia y reporting; y otra enfocada al medioambiente y proyectos. Y después, en cada país, tenemos un responsable de sostenibilidad que reporta tanto a Hispanoamérica, como al comité de dirección. A su vez, reportamos a la comisión de sostenibilidad del consejo de administración. Ahí reporta Alfonso Gómez, que es nuestro máximo responsable en Telefónica Hispanoamérica. A la par, reportamos también a nuestro corporativo en España, que además reporta a los diferentes consejos.
Marta Vegas: Al ser una área muy transversal, en realidad recorremos toda la empresa. Lo complejiza si quieres en el día a día, pero creo que, estructuralmente, tiene sentido por eso, porque somos un área transversal y por eso estamos en toda la compañía.
Marta Vegas: Sí, total. De hecho, por ejemplo, la nueva directiva del CSRD (la directiva sobre información corporativa en materia de sostenibilidad) ya te dice en un inciso que tienes que asegurar que tienes un gobierno corporativo fuerte para asegurar que se cumpla tu estrategia ESG. Entonces, si no lo habías hecho, vas a tener que hacerlo, incluso, las pymes. Y esto hace que, además, la presión vaya a la cadena de valor. Y otra parte es la cultura. Si decimos que el ESG es transversal a toda la organización, tenemos que hacer que la gente lo piense así.
Marta Vegas: Te puedo contar el caso de Colombia, donde hemos accedido a créditos asociados al cumplimiento de KPI no financieros, que nos ha hecho ahorrar. El banco nos dio una tasa de valor preferencial en un préstamo, y nosotros nos comprometemos a cumplir estos indicadores. Otro ejemplo, a nivel global, en los últimos ocho años hemos bajado el consumo de energía un 51%. Si eso lo pones en dinero…
Marta Vegas: Los washings son un peligro real reputacional porque a veces se hace por puro desconocimiento. Hay quien cree que lo hace muy bien, pero quizá podemos hacerlo mejor. O a veces pecas de cauto, de no comunicar porque suena a [greenwashing], aunque no lo sea. El tema de la sostenibilidad creo que genera mucho oportunismo, mucho charlatán y mucha confusión porque te dicen: “Dame un proyecto”, y le tienes que enseñar que esto no va de proyectos, va de estrategia.
Marta Vegas: Primero tienes que hacer tu análisis de doble materialidad, ver dónde están tus impactos en la operación, en la estrategia, en lo financiero. Y, a partir de ahí, definir en qué estás fuerte. Cuando tú centras en el core de la empresa esta visión de ASG, no tienes tanto esa necesidad de en qué letra te enfocas, porque está tan metida que cada quien está haciendo su trabajo para incorporar el ASG a su estrategia. Hace poco, una empresa me decía que no sabía qué hacer con la E, pensaba que la G y la S las tenía bien. Y me dijo sobre la E que hacían proyectos… Y creo que no acaban de integrar el ESG y cuando no es transversal sale esto de “hago proyectos”.
Marta Vegas: Yo antes tenía un presupuesto para hacer equis cosas y lo asumía desde mi área, pero lo ejecutaba otra. Cuando esa área se dio cuenta de la importancia de lo que hacía, lo presupuestaba yo y se lo traspasaba a ellos, hasta que un año dijeron: “Lo vamos a presupuestar nosotros, porque esto es nuestro”. Cuando eso sucede, es cuando las áreas entienden que el ESG no es un proyecto, no soy yo. Necesitamos dinero, claro, para hacer reportes, auditorías, para gestionar los inicios de proyecto… Por eso, cuando en algunos cuestionarios preguntan de cuánto es el presupuesto que se dedica a sostenibilidad, a mí me conflictúa y me dan ganas de decir: “¿Cuál es el presupuesto de la empresa? ¿Dos pesos?, pues dos pesos”.