Entre Argentina y México, Dolores Fernández Lobbe ha construido una carrera marcada por una visión a largo plazo.
POR: Nancy Malacara
lo largo de su trayectoria, Dolores Fernández Lobbe ha tomado decisiones que han implicado grandes riesgos,
nuevos desafíos y una apuesta permanente por la omnicanalidad en el retail. La vicepresidenta senior
de Compras Omnicanales Autoservicios de Walmart de México y Centroamérica tiene más de 15 años en la
empresa, 11 en Argentina y cuatro en México, un periodo marcado por cambios constantes.
“Lo que define mi carrera es la diversidad de industrias y roles en distintos países”, comenta al
reflexionar sobre su andar profesional. Inició en sectores como el bancario, la consultoría y el
retail. Sin embargo, aceptar su primer cargo gerencial en Falabella, en plena crisis económica
argentina en 2002, representó un antes y un después.
Con un consumo en caída y un entorno de incertidumbre, Fernández Lobbe tuvo que aprender a tomar decisiones
estratégicas que permitieran mantener operativo el negocio. “Era una industria desconocida para mí, pero ese
era mi momento para dar el salto. Me ofrecían entrar primero como comprador y luego, tal vez, evaluaban
ascenderme a gerente. Yo dije: ‘No, o voy como gerente o nada’”, recuerda.
Durante esa etapa realizó ajustes rápidos, fortaleció la confianza en su equipo y tomó decisiones complejas
bajo presión. “El aprendizaje fue exponencial. Comprendí que, en una crisis, la clave está en la
autenticidad, la disposición a aprender y la creación de una visión común”, señala.
Tras su paso por Falabella, Fernández Lobbe entró a Walmart Argentina como líder del área comercial de
mercaderías generales, y luego tomó las riendas del negocio de e-commerce en un momento en que la
operación carecía de una plataforma de pagos en línea, y la compañía global retiró el soporte técnico para
la tecnología existente.
“La opción era construir una plataforma con un proveedor local o esperar soluciones inciertas”, explica.
Junto con su equipo decidió actuar sin demora y, en siete meses, implementaron una nueva infraestructura
digital que modernizó la operación y mejoró la experiencia del cliente.
A partir de ahí, asumió posiciones en áreas como marketing, estrategia corporativa y comercio electrónico.
Esta capacidad para liderar en contextos difíciles la llevó a ser nombrada CEO de Walmart Argentina en 2019,
en cuyo cargo tuvo que enfrentar los efectos de la pandemia y coordinar la venta de operaciones en el país.
“Nada te prepara para una pandemia ni para vender una operación de 25 años”, admite.
Durante ese proceso, Fernández Lobbe aprendió a confiar en líderes más experimentados y a construir redes de
colaboración. “Hay que reconocer lo que no sabes y rodearte de expertos que puedan complementar tus
habilidades”, asegura.
En 2021, Fernández Lobbe decidió asumir su cargo actual en México. “Fue una decisión importante tanto a
nivel profesional como personal. Era la primera vez que me mudaba con mi familia, pero el potencial de
crecimiento de Walmart México y su transformación omnicanal justificaron el riesgo”, relata.
Hoy, con más de 1,400 personas bajo su responsabilidad, lidera la estrategia omnicanal en el país, donde la
empresa busca integrar, de manera fluida, las experiencias en tiendas físicas y plataformas digitales. “La
omnicanalidad es el futuro del retail. Hoy, somos el retailer más grande de Latinoamérica,
pero el reto es mantenernos así en los próximos 20 años”, afirma.
Una de sus contribuciones más importantes ha sido la digitalización de Bodega Aurrera. Mediante kioscos en
tiendas y con el apoyo de asociados, la minorista integró a usuarios que antes no compraban en línea. “Estos
clientes confían en la marca. Con los kioscos les enseñamos a aprovechar la economía digital, incluso si no
tienen acceso a servicios bancarios”, detalla.
Su liderazgo también incluye la expansión de servicios digitales en más de 3,000 tiendas, con estrategias
que se ajustan a las necesidades de cada región. Además, ha desarrollado programas de inclusión y desarrollo
de talento, convencida de que una cultura diversa fomenta la innovación y el crecimiento sostenible.
Para la ejecutiva, el éxito empresarial no se limita a resultados financieros. “Descubrí que la inclusión es
esencial para la innovación. Es lo que permitirá que los negocios sean sostenibles en el tiempo”, dice. Por
ello, ha promovido programas de mentoría y networking que fortalecen la diversidad en la
organización.
“Me han escrito personas a quienes he mentoreado, agradeciendo que se animaron a pedir un ascenso o a
aceptar nuevos retos por mis consejos”, comenta. También se declara fan de las actividades de equipo y
competencia, como deportes o juegos grupales, ya que considera que fomentan relaciones más fructíferas. “Una
buena dinámica de team building debe sacar a las personas de su rutina diaria, ayudarlas a
desconectar y crear nuevas conexiones”, señala.
En su caso, tiene muy claro el valor de la inclusión y del respeto. Para impulsarlo sin chocar con
directrices globales, Fernández Lobbe ha aprendido a navegar en grandes empresas. “Las corporaciones
globales te dan un marco, pero dentro de ese marco encuentras formas de impulsar lo que generará mayor
impacto”, explica.
Fuera del ámbito laboral, la lectura es una de sus pasiones. Actualmente, está leyendo Blink.
Inteligencia intuitiva: ¿Por qué sabemos la verdad en dos segundos?, de Malcolm Gladwell, un libro
recomendado por su jefe, que explora la importancia de la intuición en la toma de decisiones rápidas. “En un
entorno donde la tecnología evoluciona a gran velocidad, es fundamental confiar en ese instinto”, menciona.
Con tres hijos adolescentes, Fernández Lobbe prioriza actividades que le aporten energía. Para ella, los
fines de semana son intocables. Se reserva tiempo para disfrutar con amigos y practicar hockey sobre césped,
un deporte que retomó en México. “Es una combinación perfecta de ejercicio, amistad y desconexión”, asegura.
Así es como se mantiene fresca para encarar los retos que vienen, donde el más importante se traduce en
acelerar la integración entre lo físico y lo digital para duplicar el negocio en los próximos años. Su
prioridad es consolidar a Walmart de México y Centroamérica como el retailer omnicanal más relevante,
con soluciones diseñadas para cada comunidad.
Sin embargo, sabe que el verdadero reto no solo está en la innovación tecnológica, sino en la capacidad de
adaptación frente a un mercado en continuo cambio. “Reinventarse de forma constante es la única manera de
seguir creciendo y de disfrutar lo que hacemos”, concluye.