Mariana Guerra

Gerente Comercial Interino (Respiratorio Inmunología y Vacunas) de AstraZeneca México


Foto: Anylú Hinojosa-Peña

El objetivo de Mariana Guerra es crear un entorno donde todos los que forman parte del equipo se sientan en confianza para expresarse de la manera en que quieran, siempre siendo fieles a ellos mismos. Por eso, considera que es importante tener pláticas sobre diversidad e inclusión para crear ambientes seguros, “siempre a través del ejemplo”.

Guerra, quien tiene entre sus responsabilidades asegurar la creación y la generación de la estrategia de marca para el producto enfocado en lupus, de nuevo lanzamiento, y ha logrado la creación de una nueva unidad de negocio dentro de AstraZeneca enfocada en el área terapéutica de reumatología, es parte del Comité de Diversidad e Inclusión de la farmacéutica y líder del pilar de Generaciones, además de mantener un rol activo en la parte de LGBT+. “La diversidad e inclusión son temas que siempre me han apasionado y por los que siempre he buscado fomentar dentro de las empresas donde colaboro”, dice.

Entre las actividades impulsadas por el pilar Generaciones están las mentorías en reversa, una iniciativa en la que las generaciones más jóvenes son mentores de colaboradores de mayor edad y en la que se tratan algunos temas como la libertad de expresión y LGBT+. “Los más jóvenes han dado guía a las generaciones mayores para adoptar un vocabulario más amplio e inclusivo dentro del espacio laboral”, explica.

Guerra señala que hay avances, en general, en materia de diversidad e inclusión. “Hoy, la gente se siente más cómoda hablando del tema, además, un punto crucial es que se escuchan menos comentarios en contra de la comunidad dentro del espacio laboral. Si bien queda trabajo por hacer, me ha tocado colaborar en espacios donde las personas se sientan más cómodas y seguras”, afirma.

La ejecutiva señala que su experiencia, en la que ha vivido momentos de discriminación por su orientación sexual, aunada a su personalidad, que la impulsa a alzar la voz, la motivó a ser una vocera por la comunidad. “A mí no me gustaría que ninguna persona viviera los momentos que a mí me tocó vivir, por lo que me atrevo a decir que mi trayectoria inició desde atreverme a hablar con mis papás, para después involucrarme en diferentes foros, unirme a los comités de las empresas donde he colaborado, ser miembro activo en redes sociales y hacer publicaciones de días coyunturales que dan visibilidad a diferentes grupos dentro de la comunidad. Sin embargo, encuentro muy importante no encasillar estas acciones únicamente en días conmemorativos, sino mantenerlo todo el año y buscar crear conciencia dentro de mi círculo personal y profesional”.

Es vital educar a las generaciones mayores en temas de libertad de expresión, para que ellas mismas puedan tener la apertura de hablar de temas alrededor de la comunidad LGBT+.